a
|
10 de agosto, 2012 - Para evitar una crisis alimentaria y un alza pronunciada de los precios de la comida en todo el mundo, Estados Unidos debería reducir o suspender temporalmente el mandato del gobierno según el cual el 40% del maíz se destina a la producción de biocombustibles.
El Departamento de Agricultura de Estados Unidos estima que la producción de maíz de este año será la más baja en seis años debido a la sequía que afecta a su territorio. Si a eso se suma la alta cuota asignada a la producción de etanol, el resultado es escasez y precios altos en ese grano, que se reflejan, a su vez, en los precios de otros cereales y afectan a la población más pobre en todo el mundo. “Una suspensión temporal inmediata del mandato [referente a la producción de etanol] daría un respiro al mercado y permitiría que una mayor parte de la cosecha se destinara a usos alimentarios”, escribió Graziano. El titular de la FAO señaló que la situación actual, si bien precaria, aún no alcanza niveles de crisis, pero advirtió que los riesgos son altos y que una reacción inadecuada podría elevar el panorama a niveles de emergencia. |
No hay comentarios:
Publicar un comentario